El reloj y la brújula: aprendé a organizar tus tiempos

 

Hoy vamos a hablar del tiempo, del tiempo que nos falta, el tiempo que no alcanza, el tiempo que no tenemos, el tiempo que se va, y cómo vuela el tiempo. Andamos a las corridas para hacer mil cosas y no logramos hacer ni la mitad de lo que queremos.

Y por otro lado, vemos a otras personas que andan más tranquilas, es como que el tiempo les sobra, y pensamos: "...no hacen nada…"

Pero la realidad, es que los seres humanos tenemos muchas diferencias a nivel cultural, a nivel económico, diferencias en calidad de vida, diferencias en creencias religiosas, ideologías políticas, oficios, profesiones. Pero hay algo que todos los seres humanos tenemos en común…y es un día que dura 24 horas, lo que hagamos con esas 24 horas es lo que importa a la hora de ser una persona productiva.

En este artículo aprendé a organizarte y gestionar tus días de manera más productiva.

Existen dos poderosas herramientas que guían nuestra vida: el reloj y la brújula. Así como el reloj representa los compromisos, los horarios, las metas que queremos alcanzar, y las actividades que tenemos que llevar adelante para alcanzarlas, la brújula representa nuestra visión, nuestros valores y principios, la misión que tenemos en nuestra vida profesional y personal. Mientras el reloj se relaciona con el tiempo y cómo lo administramos, la brújula nos conecta con lo que sentimos que es importante y el modo en cómo dirigimos nuestra vida.

Podemos apreciar de inmediato, que ambas herramientas nos plantean un contraste: lo que tenemos que hacer en función de nuestros compromisos, y lo que debemos hacer en función de nuestras prioridades.

En pocas palabras, trataremos de resumir tips o sugerencias que te ayudarán en el dia a día:

1. Nunca dejes de planificar. Para esto es primordial saber diferenciar lo importante de lo urgente. Las personas que corren todo el día contra el tiempo consideran que todo es urgente. Pero cuando todo es urgente, nada es urgente. Es decir, que la mayoría de las tareas pierden valor, todo está en la misma categoría. Si algo es importante y urgente, hacelo de inmediato. Si es importante pero no es urgente, podés planificarlo. Si la tarea no es importante, pero sí es urgente, examiná la posibilidad de delegarla. Y si algo no es ni importante, ni urgente, descartala por completo.
2. Respetá tus horarios. Esto significa que debes conocerte, y saber cuál es tu horario más productivo. Hay personas que son más productivas a la madrugada, o a la mañana temprano, y hay personas que lo son por la noche, cuando el resto se va a dormir. Esto es muy personal, y por eso hay que conocerse a uno mismo. Con esta información, planificá tus tareas más importantes para ese horario, y procurá que nadie te moleste. Al mismo tiempo, repetá el horario de tus familiares, amigos y compañeros de trabajo.
3. Evitá los ladrones de tiempo. Estos ladrones son: reuniones y charlas interminables y sin sentido, el desorden, entre otros. En lugar de esto, en primer lugar, limitá tu disponibilidad aprendiendo a decir NO. Si nunca dices NO, nadie aprecia el SI. Al mismo tiempo, planificá las reuniones, aprovechá los tiempos muertos, como lo son las esperas, mantené un lugar de trabajo y de descanso ordenados. Se pierde muchísimo tiempo buscando cosas perdidas.
4. Automatizar el trabajo. Evitá las notificaciones de redes sociales y aplicaciones que no aportan a tu vida. Sí usá notificaciones de agenda y calendario, ya que te ayúdarán a organizarte y no depender de tu memoria. Con la ayuda de la Inteligencia Artificial, automatizá las tareas que más puedas.
5. Por último, evitá las multitareas. Viví un día a la vez, momento a momento. Empezár algo y terminarlo es muy satisfactorio. Si en algún momento te sentis atascado o atascada en el proceso, descansá, despejá la mente, respirá, practicá mindfullness, y luego continuá.

Es cierto que el tiempo se va volando. La buena noticia, es que vos sos el piloto de tu vida. Vos podés organizarla como quieras. Recordá también que la buena planificación, no es tener ocupado cada minuto del día. Al contrario, incluir descansos, comidas tranquilas, ejercicio físico, y gratos momentos con amigos y familia, son fundamentales para que tu planificación sea exitosa. 

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